Un reciente estudio del Instituto ‘Northwestern Medicine’ de la ciudad de Chicago, sugiere que una proteína llamada oncostatina M (OSM) puede deteriorar la barrera epitelial de las vías respiratorias.
Dicha barrera epitelial es una pared de células que bloquea
patógenos, distintos factores ambientales y alérgicos, además se encarga de
activar el sistema inmune del cuerpo.
Los resultados finales de la investigación pueden tener suma
importancia para pacientes con enfermedades en la mucosa, como el asma
alérgica, la esofagitis eosinofílica y la sinusitis crónica.
El asma alérgica es la inflamación y obstrucción
de vía aérea, producto de que el individuo respira sustancias alérgicas (polen,
ácaros, etc.).
La esofagitis eosinofílica es el resultado de la
inflamación del esófago por un tipo de leucocitos sanguíneos llamados eosinófilos.
La sinusitis crónica es la inflamación e hinchazón de los
senos paranasales producida por bacterias.
La función de la barrera epitelial es muy importante para mantener
a los patógenos fuera de los tejidos. Esta se puede considerar la primera línea
de defensa contra elementos que podrían provocar una respuesta inmune, que
puede llevar a la inflamación crónica.
Uno de los hallazgos del estudio ha sido que los niveles de
OSM fueron mayores en los tejidos nasales de pacientes con sinusitis crónica,
en comparación con los individuos sin esta patología.
A continuación, los investigadores estudiaron la proteína en
cultivos de células epiteliales bronquiales y nasales. Dichos cultivos se
trataron con concentraciones de OSM similares a los observados en la primera
prueba, luego se midió la resistencia y permeabilidad de la capa de células.
Con el aumento de las dosis de OSM se observó una disminución en la resistencia de la capa de células y un incremento en la permeabilidad.
Con el aumento de las dosis de OSM se observó una disminución en la resistencia de la capa de células y un incremento en la permeabilidad.
En definitiva, el estudio sugiere que esta proteína puede
desempeñar un papel en el mecanismo detrás de la alteración de la barrera
epitelial y las condiciones crónicas que resultan de de ella. Sin embargo, los
efectos de la proteína oncostatina no son necesariamente permanentes, después
del bloqueo de esta, las células epiteliales fueron capaces de recuperar su
función de barrera.
Para terminar
La proteína oncostatina M (OSM) tiene muchas otras funciones
importantes en el cuerpo, por ejemplo, está involucrada en el desarrollo óseo y
el metabolismo del hígado. Por tanto, es muy probable que futuras terapias
dirigidas a bloquear la OSM
sean administradas por inhaladores, para de esa forma proporcionar un
tratamiento a nivel local.